Hola a todos,
Antes de que alguien señale lo demagógico del título, decir que de lo que voy a hablar es de la tesis que ha mantenido la CEOE de que para la recuperación económica es necesario el abaratamiento del despido, tal y como dijimos en el post anterior.
El meollo de la cuestión es que desde esta insigne patronal presidida por otro igualmente insigne empresario, Gerardo Díaz Ferrán (en la imagen), se ha dicho una y otra vez (lo que impide que pueda ser considerado un desliz o un error) que es necesario que para que el sector empresarial español pueda recuperarse, y con él el empleo, es preciso "abaratar el coste del despido"; despido a secas, sin más adjetivos. Tal cosa no ha sido bien recibida por los trabajadores y los sindicatos, claro está. Pero siguiendo la tradición española, se ha recurrido a aquello de contar mentiras con apariencia de verdad para tratar de convencer al perjudicado de que se deje perjudicar. Vamos, la puesta en práctica de la estrategia de "Guzmán el Bueno" que tantas otras instituciones españolas han utilizado en el pasado y aún hoy en día, desde el Gobierno hasta el Tribunal Constitucional: vamos a joderle bien, pero no se preocupe que si nos deja explicárselo, saldrá convencido de lo oportuno de hacerlo.
La culminación de esa estrategia es meter dentro del pensamiento colectivo la siguiente idea en la que se omite una cantidad ingente de información:
A mi, empresario, me cuesta mucho dinero despedir a un trabajador-45 días por año trabajado- , lo que dificulta mi recuperación económica y me impide contratar a más personas, tanto por el gasto que genera el despido como por tratar de evitar tener que despedir en un futuro a las personas a las que dé trabajo ahora. Esto, no obstante, no significa un recorte de derechos y garantías del trabajador, en absoluto. Ustedes, los sindicatos, están muy equivocados. Lo que pasa si no abaratamos el despido es que entonces tenemos que contratar a la gente mediante contratos temporales, no podemos contratar indefinidos porque nos sale muy caro despedirlos. Ya sabe que a los temporales símplemente no les renovamos el contrato. Así que digo yo que más vale recibir una indemnización mucho más pequeña que no recibir ninguna. Esto es bueno para vosotros, muchachos. Y no, nos deis las gracias por ser tan generoso, no las merecemos.
Esto es, más o menos, lo que desde CEOE se ha venido diciendo(1). Pero es curioso que unos señores que se dedican al ámbito empresarial no puedan siquiera concretar qué tipo de despido desean abaratar, aunque no es difícil de averiguar a tenor por la indemnizacion que incompletamente citan (45 días por año trabajado, omitiendo interesadamente el tope de mensualidades). Quizá porque de hacerlo, se les vería el plumero.
Señoras, señores, lo que las damas y caballeros de la CEOE quieren abaratar es el DESPIDO IMPROCEDENTE, que es tal cuando el trabajador NO tiene responsabilidad o culpa alguna en dicho despido; es más, es tal cuando la Ley no reconoce como justificado el despido. Dicho en otros términos, es cuando el empresario decide arbitraria e injustificadamente echar a la puta calle al trabajador. Sin más. No hay más debate, porque no hay otro tipo de despido que acompañe la indemnización que citaba la CEOE.
De lo más perverso es decir que las condiciones económicas hacen insostenible este tipo de despido, o lo que es lo mismo, que no pueden permitirse el lujo de recortar plantillas a ese coste. Es, como decía, perverso, porque los empresarios que tienen problemas económicos que justifiquen el despido de un trabajador pueden recurrir al DESPIDO OBJETIVO (hasta una cierta cantidad de despidos en un espacio de tiempo concreto) o al conocido EXPEDIENTE DE REGULACIÓN DE EMPLEO (ERE) (si son muchos trabajadores, para entendernos) , que permite despedir a un trabajador por causas esconómicas con una indemnización de tan sólo 20 días por año trabajado con su correspondiente límite de mensualidades.
Lo que pasa es que para poder acceder a esas figuras, es necesario acreditar mediante una abundante documentación contable el estado de dificultad económica de la empresa, lo cual arroja luz sobre sus cuentas y actuaciones; a lo que muchos empresarios no quieren exponerse porque tienen cosas que ocultar.
En resumen, que se dejen de milongas y que digan, a las claras, que lo que quieren es seguir jodiendo al trabajador común. pero lo peor, como decía, es que encima pretendan hacernos pasar a todos por tontos y convencernos de que o se acepta esto, o no habrá trabajo. Claro. Y ellos son hermanitas de la caridad.
(1):"El despido, que ahora sea más caro, impide a pequeños empresarios coger más trabajadores", "La patronal ha observado que, al final, en los tribunales esta compensación para el trabajador se eleva a los 45 días".